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Las bañeras de aguas mineromedicinales son un poderoso antídoto natural contra la ansiedad y el estrés. Sanan el cuerpo cansado, al mismo tiempo que proveen un ambiente de disfrute.
Desde Castilla Termal Hoteles os contamos algunas de las propiedades que aporta esta práctica a nuestro cuerpo y mente:
Los efectos de la inmersión en aguas termales ayudan a relajar la mente y proveen un estado de calma y serenidad plenos. Contribuye a reducir el exceso de ansiedad, mejorando el descanso y la calidad del sueño.
Las tensiones musculares pueden manifestarse en el cuello, en la parte baja de la espalda, piernas, brazos, etc., y mejoran con una combinación de bañera de aguas termales, masajes y otros procedimientos terapéuticos, diseñados para proveer bienestar físico.
Las enfermedades de la piel, al tener contacto profundo con aguas termales, experimentan una mejoría significativa en los días próximos al baño. Las que contienen una concentración mayor de azufre, son las ideales para disminuir padecimientos cutáneos como la psoriasis, la dermatitis y los hongos. Asimismo, son efectivas en la cura de heridas.
La bañera de aguas mineromedicinales aumenta la temperatura corporal, activando la circulación y la oxigenación. Así, contribuye a la depuración de toxinas de nuestro cuerpo. Esto favorece la belleza, la piel sea ve más radiante y el cabello más saludable por el hecho de aumentar el flujo sanguíneo.
Las aguas mineromedicinales contribuyen a la alimentación de los tejidos del cuerpo, incrementando el metabolismo. Al mismo tiempo, la temperatura del agua y duración de la experiencia estimula el intestino, favorece la digestión y mata gérmenes.
¿A qué esperas para sumergirte en las propiedades de nuestras bañeras termales?